El objetivo de este día, es hacer una prioridad política la reducción de la mortalidad de niños y madres, así como la movilización de miles de personas tanto en países ricos como pobres.
En definitiva, que ningún niño menor de cinco años fallezca por causas prevenibles y que las actitudes del público no tolerarán un retorno a altos niveles de mortalidad infantil.
En muchas ocasiones, las muertes a las que se enfrentan los niños son producidas por enfermedades que se pueden prevenir como la neumonía, las complicaciones derivadas durante el parto o la desnutrición.
Existen diversas soluciones, respuestas asequibles que salven la vida de los niños, así como una gran labor de prevención y tratamiento de enfermedades, en las que todos podemos colaborar.
Según Unicef muchos Niños en el mundo se ven expuestos a peligros que afectan su crecimiento y desarrollo, se busca generar acciones para “proteger la vida y mitigar considerablemente los sufrimientos de los niños».