Tras el cierre de las emisoras radiales Máxima y recientemente, Eco FM el reconocido columnista, ex presidente legislativo y ex diputado José «Cheo» Salazar, dio contundentes declaraciones sobre el caso.
«No estoy de acuerdo con lo que dices, pero defenderé con mi vida tu derecho a expresarlo», Voltaire.
Indistintamente de la opinión que cada quien pueda tener acerca de la línea editorial y la programación de un medio de comunicación social, lo cierto del caso es que, el régimen usurpador, ha cerrado dos emisoras de radio y una televisora local, sin formula de juicio, cercenando la libertad de expresión, avanzando en la censura e imponiendo la dictadura comunicacional. El pensamiento único, pues.
Eso, por razones de principios, hay que condenarlo y rechazarlo. Es una violación de derechos humanos fundamentales. El derecho a libre expresión, información, opinión y empresa. Es dictadura pura y dura.
He sido víctima del uso y abuso de la libertad de expresión y el control férreo de un dueño de un medio de comunicación social, el cual, quien no entraba en su órbita chantajista, lo exponía al escarnio público, sin derecho a réplica. Vetado y punto, empero, en las oportunidades que el régimen intento cerrarlo, cerré filas en su defensa. No estaba de acuerdo con lo que decía, pero defendía, aunque herido en mi honor, su derecho a expresarlo. Y no tengo cicatrices en el alma, mucho menos abrigo odios. Es cuestión de convicción.
Los ejercicios de hipocresía no tienen cabida a la hora de defender, proteger, ejercer y practicar la libertad de expresión. To be, or not to be, that is the question.
José «Cheo» Salazar