La Organización Mundial de la Salud (OMS), ha mostrado recientemente su preocupación por la popularización de las pruebas de virginidad en Reino Unido.
De acuerdo a la OMS, el polémico examen es más bien un abuso, ya que el test verifica si el himen está intacto o no.
No obstante, la prueba carece de evidencia científica, pues el himen femenino puede romperse por múltiples motivos.
Cabe destacar, que en Reino Unido hay cerca de 20 clínicas que practican este examen y también ofrecen cirugías para recuperar la virginidad.