El incidente suscitado en India ha dejado una estela de indignación y coraje a lo largo y ancho de internet, y es que para muchos es impensable que nadie quiera hacerle algo semejante a un animal tan noble.
Lo cierto es que en ese país con la población más grande del planeta después de china, los elefantes suelen generar problemas a causa de la invasión por parte del hombre, de sus hábitats naturales, que cada vez tiene menos territorio.
Se estima que entre 2014 y 2019, alrededor de 2300 personas fallecieron en ataques de elefantes. 510 elefantes murieron en el mismo período, según datos del gobierno nacional.
El hecho delesnable ocurrió el pasado 23 de mayo, según aseguraron funcionarios forestales que, para los lugareños de las tierras agrícolas en el distrito de Palakkad del estado de Kerala, al sur de la India, es un accionar normalizado esparcir fruta que continentes de petardos con la intención de persuadir a los animales de dañar los cultivos.
Después de que Mohan Krishnan, un oficial de silvicultura, compartiera una disculpa dirigida al elefante el pasado 30 de mayo; en la que además informaba que el animal había fallecido por comer una piña que contenía explosivos en su interior, las circunstancias de la muerte del animal se dieron a conocer, regandose como la polvora en todas las redes sociales.
La elefanta embarazada había salido del Parque Nacional Silent Valley con el objetivo de alimentarse cuando se produjo el incidente.
Varios lugareños encontraron al animal tratando de refrescarse en una laguna poco después. Sin embargo, cuando trataron de sacarlo del agua para llevarlo a un centro de tratamiento, se derrumbó y murió.
«Lo siento, hermana», escribió Krishnan, testigo de la muerte del elefante, en su Facebook. « Se paseaba hambrienta sin poder comer con la boca y la lengua destruidas por la explosión. Debe haber estado más preocupada por la salud del niño dentro de ella que por su propio hambre».
«Solo sabemos que la lesión fue causada por alguna sustancia explosiva», señaló Surendra Kumar miembro de jerarquía en la protección de la fauna del estado de Kerala. «Los autores podrían enfrentar cargos de crueldad hacia los animales que podrían traducirse en multas o penas de prisión».
“La piña llena de petardos explotó en su boca, causándole graves heridas”, explicó a AFP Kumar. Además, agregó que el mes pasado ya se había producido un hecho similar.
