Monseñor Aldo Giordano, nuncio apostólico en Venezuela entre octubre de 2013 y mayo de 2021, falleció este jueves por coronavirus. Tenía 67 años de edad.
La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) dio a conocer la noticia y lamentó la muerte de Giordano, quien fue designado en mayo nuncio apostólico ante la Unión Europea por el papa Francisco, luego de casi ocho años en Venezuela.
Una de las últimas responsabilidades de Giordano como representante del Papa en Venezuela fue presidir la ceremonia de beatificación del doctor José Gregorio Hernández, conocido como el médico de los pobres, acto que según dijo entonces deseaba que ocurriera desde su llegada al país.
“He tenido la suerte de despedirme de Venezuela con la beatificación de José Gregorio Hernández, quedan en mi corazón”, expresó monseñor Giordano en un acto de reconocimiento a su labor realizado por El presidente Nicolas Maduro, quien quiso otorgarle un reconocimiento. El prelado lo declinó al recordar que en su labor como embajador del Vaticano en el país solo se enfocó en “servir a la paz, la reconciliación y el diálogo”.
“Yo he pedido en nombre del Papa renunciar a esta condecoración porque el papa Francisco nos dice: en un país, ustedes, mis representantes, deben ir a servir, a ayudar, y no a buscar algo de honor”, manifestó Giordano.
El nuncio también reconoció lo difícil que era para él dejar Venezuela, cuyo pueblo, dijo, le “robó el corazón”.
“Fue una sorpresa despedirme del país con la beatificación de José Gregorio Hernández; fue un gran regalo y estoy agradecido de haber podido vivir este acontecimiento especial para Venezuela”, expresó el arzobispo en una ceremonia de despedida con los obispos del país.
