Un grupo de 30 ladrones fuertemente armados sembró el terror entre anoche y la madrugada de hoy al atacar un banco en la sureña ciudad brasileña de Criciuma, donde tomaron rehenes y cruzaron tiros con agentes policiales.
Según la Policía, los actos ocurrieron cuando la localidad se vio completamente bloqueada por la acción de los criminales que descargaron ráfagas de grueso calibre durante dos horas e hirieron al menos a dos personas (un diputado y un vigilante).
La ciudad vivió una ‘noche de terror, fue algo surrealista, distinto a todo lo que estamos acostumbrados acá’, comentó el alcalde Clesio Salvaro.
«Después de la medianoche se escucharon los primeros repiqueteos de armas de guerra y explosiones», según relataron vecinos de la ciudad de 230 mil habitantes.
La policía encontró 10 coches usados por los agresores. Los vehículos son de ‘gran potencia y valor comercial’, según el diputado Vitor Bianco.
En la huida parte del dinero se dispersó por las calles. Los delincuentes también dejaron 30 kilogramos de explosivos.
