Mi pueblo está loco, loco, loco de perinola
Transitando en esta mañana por la pasarela principal izquierda de la primera carrera, cierto hombre desfasado se detiene frente a mí haciéndome esta pregunta ¿Señor usted no sabe por aquí dónde puedo encontrar un psiquiatra?
Sorprendido respondo «Psiquiatras somos todos, lo que faltan son mas locos y pronto lo estaremos por la escasez y lo costoso de la comida, la gasolina, el gas y las medicinas y un dolar que nos tiene con las patas pa’ arriba, pero siga adelante maestro, tal vez sea usted uno de ellos y al llegar a la zona del luchador se encontrará con dos vías: Una lo conducirá a Puerto la Cruz y Barcelona y la otra carretera lo llevará directo al psiquiátrico de Ciudad Bolívar».
¡No me joras!
Aquel hombre desfasado y de la pregunta, según viajeros le contaron a este cronista, que lo vieron a la altura de La Viuda descalzo y sin camisa por la carretera nacional rumbo a Ciudad Bolívar para hacer la cola, ya que allí, era donde estaba inscrito y le tocaba votar ¡Loco e’ perinola!
¡No me joras!