Una diatriba entre marido y mujer donde nadie se debe meter
Dos «locos»
El borracho Julio y Tomasa la buena moza, ambos residentes en el callejón Jefes, sector Barrio Orinoco de Casco Viejo, en una de sus tantas discusiones Tomasa le decía: «Mira Julio ya estoy cansada de tus borracheras».
Julio contestaba «Entonces de esta casa me voy, porque yo también estoy cansado de tu peleadera».Al salir Julio a la calle con maletín en mano, Tomasa vio que la vaina era en serio y bajándose el pantalón hasta más abajo de su parte vaginal a esta de cachetadas le daba y llamándolo a mitad de camino le dijo: «¡Entonces Julio te vas de la casa y esta carajita grandecita y gordita a quien se la vas a dejar!».
Volteandose Julio al ver aquello se puso a pensar: «Tiene razón Tomasa, seguiré soportando las peleaderas porque a quién le voy a dejar esa cara tan risueña que Tomasa tiene entre esos dos pilares de piernas».
Exegénesis
Explicación
Esta anécdota aconteció casi a la salida del año 2020. Fue redactado con la enuncia de sus protagonistas y al ver la redacción del cronista ambos se dijeron ¡Ahora seremos famosos! Ya que eso al ser publicado, la gente gozará un puyero y ambos sonrreidos se abrazaban, dándose en amores caricias y besos.