Pixie Curtis, es una niña de 10 años propietaria de una empresa de juguetes y accesorios para el cabello, lo cuál le da la posibilidad de jubilarse a los 15 años de edad, si así lo desea.
La niña es hija de Roxy Jacenko, una empresaria de Australia reconocida por ser la directora de la famosa firma «Sweaty Betty PR», localizada en Sídney. Por lo visto, Pixie siguió los pasos de su madre y está generando una gran fortuna.
Jacenko y Curtis lanzaron su negocio de juguetes “Pixie’s Fidgets” y en tan sólo 48 horas todos los productos disponibles se agotaron. Además, durante su primer mes como empresa facturaron 200 mil dólares australianos (143 mil dólares estadounidenses aproximadamente)