El servicio meteorológico de Francia (Météo France) decretó hoy el estado de alerta naranja en seis provincias del sur del país y otra, Gard, en nivel rojo debido a las fuertes lluvias e inundaciones que se prevén.
Las autoridades advirtieron que ‘estas tormentas serán localmente violentas’, con previsiones de fuertes rachas de viento, granizo y una importante actividad eléctrica, como fue el caso en Gard donde se contabilizaron más de 19 mil rayos desde el comienzo de la tormenta, a las 6 de la mañana, ‘con un pico de casi seis mil por hora’.
Además las fuerte intensidad de las lluvias provocó en esta provincia el corte temporal de la autopista A9, entre las localidades de Gallargues y Nimes, y la interrupción de los trenes regionales y de alta velocidad entre esta última ciudad y Montpellier.
El gobernador de Gard declaró haber movilizado a 350 bomberos y unidades de protección civil, sin que hasta el momento se hubieran producido víctimas.
Al noroeste de Nimes se registraron deslizamientos de tierra y coches arrastrados por las crecidas de ríos, mientras las autoridades aconsejaron alejarse de los cauces, ‘no bajar a los sótanos’ y ‘no utilizar los automóviles’.
