Yosmany Guerra comenzará la cuarta semana de la eliminatoria con una cadena 14 encuentros embasándose, la más prolongada en el campeonato.
Además, el toletero zurdo es dueño de una seguidilla activa de 12 desafíos con al menos un hit. En sus últimos cuatro juegos liga de 12-8, lo que le ha ayudado a elevar su promedio a .413, el mejor del circuito. Guerra también lidera la LVBP en OBP (.542) y es segundo en OPS (1.042). Todo después de fallar en sus primeros siete turnos en la temporada, en su estreno con los Tigres de Aragua.
Ese lento comienzo quizás tuvo que ver con el parón que generó la Covid-19 y la suspensión de la Liga Mexicana de Beisbol, el circuito en Guerra ha pasado sus veranos desde 2016.
“Este año la preparación fue un poco difícil. Por la situación, los gimnasios estaban cerrados, pero uno siempre hace sus sacrificios, desde hace tres meses he estado jugando y viendo pitcheos”, declaró el cubano durante los entrenamientos de pretemporada. “Físicamente me siento bien, pero falta adaptarse para estar al 100%. Eso lo vamos agarrando en el camino”.
Una vez consiguió el ritmo de juego, ha sido el out más difícil de la liga. Ya el año pasado lo había demostrado con las Águilas del Zulia. Intervino en 42 desafíos y logró adueñarse de una almohadilla en 38 oportunidades, incluida una seguidilla de 16 encuentros con imparables.
“Me sentí a gusto con la directiva de las Águilas, que me abrió las puertas al beisbol venezolano, porque es una liga de mucha calidad. Me siento muy contento de regresar”, apuntó el experimentado antillano, de 37 años de edad. “(Ahora, con los Tigres) llego con el mismo entusiasmo. Mi mentalidad es hacer un mejor trabajo que el año pasado y esperar que todo marche bien esta temporada”.
En la 2019-2020, exhibió una línea ofensiva de .388/.497/.460, en 169 apariciones legales, en las que además negoció 30 boletos y se ponchó apenas 11 veces, a razón de una vez cada 15 visitas al plato. Cifras difíciles de replicar, pero que hasta ahora parece encaminado a superar, para honrar su compromiso con el conjunto de Maracay. Ya suma 13 boletos por apenas cuatro abanicados en 59 apariciones legales.
Ese excepcional contacto y capacidad para estar en circulación le permiten encabezar a todos los toleteros de la liga con un OBP de .509 desde la campaña anterior, en 228 apariciones legales.
El récord de más encuentros embasándose en la franquicia de los Tigres está en manos del jardinero Lew Ford, con 39, repartidos en dos campañas, entre el 16 de octubre de 2002 y el 16 de octubre de 2003, de acuerdo con el departamento de prensa del club.
Guerra sólo podría colocarse a un desafio de igualar esa marca si se mantiene en circulación por los restantes 24 encuentros en el calendario de los Tigres. Una tarea, si no imposible, realmente difícil. En tanto que hacerlo en dos años, como Ford, dependería de muchos factores, entre ellos ser repetido como extranjero en la 2021-2022, algo que está fuera del control del toletero zurdo. Con las Águilas cerró la ronda regular con seis encuentros seguidos en base.
El registro de más juegos al hilo con indiscutibles, luce más cercano, pero igual de complicado. Es de 20 partidos y ha estado en manos del segunda base y toletero zurdo estadounidense Duane Kuiper desde la zafra 1975-1976 (21/19 al 14/11 de 1975).
Pase lo que pase, las capacidades ofensivas que ha mostrado Guerra en la LVBP, serán clave en las aspiraciones de Aragua, como lo fueron el año pasado para Zulia.
Fuente Prensa LVBP
